TRIAC.


El TRIAC (“Triode of Alternating Current”) es un tiristor bidireccional de tres terminales. Permite el paso de corriente del  terminal A1 al A2 y viceversa, y puede ser disparado con tensiones de puerta de ambos signos.  



Cuando se trabaja con corriente alterna, es interesante poder controlar los dos sentidos de circulación de la corriente. Evidentemente, con un SCR, sólo podemos controlar el paso de corriente en un sentido. Por tanto uno de los motivos por el cual los fabricantes de semiconductores han diseñado el TRIAC ha sido  para evitar este inconveniente. 


El primer TRIAC fue inventado a finales de los años 60. Simplificando su funcionamiento, podemos decir que un TRIAC se comporta como dos SCR en antiparalelo (tiristor bidireccional). De esta forma, tenemos control en ambos sentidos  de la circulación de corriente. 




Muestra el símbolo utilizado para representar el TRIAC, así como su estructura interna en dos dimensiones. Como se ha mencionado, el TRIAC permite la conducción de corriente de ánodo a cátodo y viceversa, de ahí que los terminales no se denominen ánodo y cátodo, sino simplemente ánodo 1 (A1)  y ánodo 2 (A2). En algunos textos dichos terminales se denominan MT1 y MT2. 


Como en el caso del SCR, tenemos un terminal de control denominado puerta que nos permite la puesta en conducción del dispositivo en ambos sentidos de circulación. Si bien el TRIAC tiene varios mecanismos de encendido (con corrientes positivas y negativas), lo más usual es inyectar corriente por la puerta en un sentido para provocar la puesta en conducción.  



Se puede observar que presenta estado de conducción tanto para iA positiva como negativa, y puede ser disparada desde el estado de corte al de conducción tanto para vA1A2 positiva como negativa. Además, la 
corriente de puerta que fuerza la transición del estado de corte al de conducción puede ser tanto positiva como negativa. En general, las tensiones y corrientes necesarias para producir la transición del TRIAC son diferentes según las polaridades de las tensiones aplicadas. 







Una de las ventajas de este dispositivo es que es muy compacto, requiriendo únicamente un único circuito de control, dado que sólo dispone de un terminal de puerta. Sin embargo, tal y como está fabricado, es un dispositivo con una capacidad de control de potencia muy reducida. En general está pensado para aplicaciones de pequeña potencia, con tensiones que no superan los 1000V y corrientes  máximas de 15A. Es usual el empleo de TRIACs en la fabricación de electrodomésticos con control  electrónico de velocidad de motores y aplicaciones de iluminación, con potencias que no superan los 15kW. La frecuencia 
máxima a la que pueden trabajar es también reducida, normalmente los 50-60Hz de la red monofásica.